Amarás al Señor tu Elohím de todo tu corazón, y de toda tu alma,
y con todas tus fuerzas. - Deuteronomio 6:5
– No deben temerme; ¡deben amarme!
Pero el amor no se puede obtener por la fuerza.
Pero el amor no se puede obtener por la fuerza.
No se lo motiva con mandamientos.
Porque debemos aprender que como criaturas fracasamos en nuestro destino, y que por nosotros mismos,
no podemos amarlo.
Necesitamos tener el amor como fruto de Espíritu Santo.
Porque el ser humano es un pecador, por ende un enemigo de DIOS,
un ofensor de Su Santidad, y hace lo posible para alejarse de Él.
Pero allí ocurre el milagro de la gracia.
DIOS nos busca, no con una caña , sino con cuerdas de amor, a través de la persona de su amado Hijo, a quien dio por nosotros.
Nos busca con la generosa entrega de Su Hijo unigénito, Yeshúa Ha Mashíaj.
Nos busca porque nos ama. Con amor inefable.
Y con ése, Su amor, nos motiva, , a amarlo con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, y con todas nuestras fuerzas !
Es decir, con todos nuestros pensamientos, nuestras emociones y nuestra potencia vital, con todo nuestro espíritu !
Nos motiva a honrar Su nombre, en la obediencia, con todo, absolutamente todo nuestro ser.
Y en ella nos bendice, como Sólo Él sabe hacerlo.
SHALOM, amados !
